El mexicano José Sulaimán, presidente del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), manifestó ayer su compromiso para evitar que la anunciada quiebra del organismo afecte la carrera de los boxeadores y campeones mundiales.
"Tenemos un enorme compromiso con nuestros campeones mundiales y los clasificados, promotores, manejadores y todos los demás que formamos la familia del boxeo", dijo Sulaimán en un comunicado tras el anuncio de quiebra del CMB.
Sulaimán precisó que todos los que han formado el organismo durante 41 años "debemos ofrecer la seguridad de que por ningún motivo (los boxeadores) saldrán perjudicados, ni en lo personal ni en lo institucional".
Precisó que la quiebra del organismo se completará en un par de meses, aunque eso no supondrá el final de la "leyenda escrita para bien del boxeo en 41 años".
El dirigente del boxeo indicó que más allá de la desaparición del organismo que preside desde 1975, "seguiré en alguna otra modalidad entregando lo mejor de mí mismo al servicio del deporte de mis amores".
Sulaimán se dijo seguro "de que muchísimos otros me acompañarán en ese nuevo quehacer", en una alusión a la posible creación de un nuevo organismo del boxeo profesional con los mismos integrantes que actualmente tiene el CMB. Lamentó la situación del CMB de haberse declarado en quiebra ante la imposibilidad de pagarle 31 millones de dólares al boxeador alemán Graciano Rocchigiani.
MUY PREOCUPADO
José Sulaimán, presidente del CMB está muy preocupado por la situación, pero sostuvo que no dejará en el aire a todos los que han tenido que ver con el CMB.