La policía israelí investiga una red de apuestas que presuntamente se dedica a un macabro juego de azar: predecir dónde ocurrirá el próximo ataque suicida palestino.
La red de apuestas surgió en la ciudad de Kiryat Malachi, en el sur de Israel, donde los apostadores locales pueden rellenar un formulario en el que se incluyen las probabilidades de las distintas ciudades y regiones de Israel, informó ayer el semanario Zman Tel Aviv.
La ley israelí prohíbe las apuestas, pero el juego florece en establecimientos ilegales por todo el país y en barcos que recogen a los apostadores en los puertos israelíes.
Los israelíes suelen comparar sus vidas cotidianas con el juego de la ruleta rusa, debido a la frecuencia con que se producen los ataques suicidas palestinos en autobuses, cafés, restaurantes y celebraciones familiares.
Según el semanario, las ciudades que han sido blanco frecuente de ataques palestinos ofrecen las menores ganancias. Las apuestas mínimas están en 10 shekels (unos 2 dólares) en una ciudad por cada apostador y debe renovarse cada vez que se produce un atentado. |