Unos 90 millones de dólares por año es lo que gasta el Estado panameño para el tratamiento de pacientes enfermos de cáncer y otras enfermedades, a causa de fumar. Esta cifra contrasta con los 11 millones de dólares que las empresas tabacaleras desembolsan al Estado por impuestos, dijo Nélyda Gligo, coordinadora de la Coalición Panameña contra el Tabaquismo.
Esta situación abrirá un nuevo frente de batalla contra esta adicción por parte de la agrupación, que solicitará formalmente un aumento de impuesto a los fabricantes de cigarrillos, aseguró Gligo.
A la vez denunció que a pesar que existe una ley que prohíbe fumar en lugares abiertos y cerrados se está violando abiertamente con el consentimiento de los administradores de restaurantes, casinos, cines y otros sitios.
Actualmente un 30% de la población panameña es fumadora y desde los 9 años niños y niñas empiezan a fumar.