El mandatario Martín Torrijos reconoció ayer que se equivocó en el método utilizado para pasar las reformas al sistema de seguridad social, pero alegó que la intención es buena, porque se evita una futura explosión social.
Al mismo tiempo, sus ministros no llegaron a acuerdos con el Frente Nacional por la Defensa de la Seguridad Social (FRENADESSO) para poner fin a la huelga que hoy cumple 15 días y que ha dejado pérdidas por B/.55 millones. Las partes acordaron reunirse mañana y el domingo.
Torrijos reconoció que las reformas han afectado a muchos, pero advirtió que si no se daban, no iba a ver país para nadie, porque se daría una explosión social.