La decisión del Partido Popular (PP) de empezar a proyectar su divorcio con el PRD respondió a una estrategia sugerida por Milton Henríquez, en común acuerdo con la Secretaría Ejecutiva Nacional (SEN) del partido.
Previo al Congreso Nacional del PP, donde acordaron declararse "oposición independiente", la dirigencia del colectivo realizó un análisis del escenario político donde se debatió sobre tres premisas.
La primera de estas tesis es que si el PP se mantenía al lado del PRD, su proceso de reestructuración se vería dilatado por lo menos dos años que es el tiempo que la dirigencia de los "verdes" estima que las corrientes perredistas mantendrán sus diferencias internas por el control del partido.
La segunda variante analizada por el PP era la manifestación de apoyo a Cambio Democrático (CD) y Ricardo Martinelli para colaborar en su gobierno, pero al final se concluyó que aquello se vería como una acción oportunista y a la vez negativa para la alicaída imagen del partido. Luego de varios análisis, lo prudente y lo mejor para el partido fue declararlo "oposición independiente".