Hace unos días, Audi presentó el A3 TDI Clubsport quattro, un prototipo que el año pasado la firma demostró en el Whorthersee Tour.
Se caracteriza por su imponente apariencia exterior, su cabina abierta, su motor de 300 CV y su tecnología, derivada de competencias deportivas. Su parabrisa bajo y plano, con el pilar A, muy corto, que desempeña junto con los arcos de seguridad, que protege de vuelco a sus ocupantes. El parachoques delantero alberga dos grandes tomas de aire y una parrilla similar a la del TTS.
Con frenos ventilados de disco de 340 mm, para el eje delantero y de 310 mm para el trasero. Su interior se caracteriza por la combinación negro/naranja y el contraste del aluminio de algunos de sus elementos.