Sin atención en el puesto de salud, ni recursos económicos y con una carretera inaccesible se encuentran los residentes de El Guayabo en Toabré en el norte de Penonomé. Ellos aseguran sentirse abandonados.
En esta comunidad son constantes las mordeduras de serpientes y picaduras de alacrán, sin embargo, en el puesto de salud no hay suero, porque no hay un equipo especializado que pueda aplicarlo.
Actualmente el puesto de salud está cerrado, porque el asistente está de vacaciones y Salud no ha designado un reemplazo.
Otra de las denuncias que hicieron los moradores es la falta de agua en la escuela de la comunidad, por lo que requieren de un acueducto.
Luego de que los campesinos de El Guayabo denunciaran el hecho, funcionarios de la Oficina Regional de la Defensoría del Pueblo en Coclé, realizaron una gira a la comunidad apartada, a dos horas en vehículo desde Penonomé.
Paul Bouche, encargado de la oficina Regional de la Defensoría del Pueblo en Coclé dijo que ellos el 1 de abril de 2009 realizaron una primera visita a esta comunidad, pero ahora se dieron cuenta que la situación está peor.
Se trata de una comunidad tan abandonada que los estudiantes ni siquiera reciben cremas nutricionales para su adecuada alimentación, lo que afecta la salud de los niños.
Además indicó que realizarán las gestiones para que se corrija esta irregularidad y no se afecte el derecho a la salud de esta humilde comunidad.