Aunque todas las casas tienen tendido eléctrico y en las calles existen luminarias instaladas, en las noches las familias continúan encendiendo las lámparas que kerosén, y las lámparas de mano no fatal para los pobladores de la comunidad de Altos del Jobo en el corregimiento de La Represa.
En 1994 el entonces Fondo de Emergencia Social (FES) adquirió e instaló en la comunidad, tres generadores de electricidad además de sembrar 34 postes de tendido eléctrico beneficiando así a unas 50 familias.
Para el año 2000 uno de los generadores sufrió serios desperfectos y quedó inutilizado, y un año más tarde otros dos generadores sufrieron la misma suerte.
Desde entonces las amas de casa desempolvaron las lámparas de kerosén y las “guarichas” volvieron a ser utilizadas, especialmente por los niños para que puedan terminar sus tareas.
Cada turbina era de cinco caballos de fuerza y el daño se resume a que la tarjeta madre se quemó y desde entonces ninguna autoridad ha realizado gestión alguna para su reposición.
Rodrigo Jaén indica que una solución sería interconectar a la comunidad de El Jobo con la línea de Edemet-Edechi, la cual dista cinco kilómetros una de la otra.
De lo contrario habría que invertir entre 50 mil a 60 mil balboas que costaría adquirir la nuEva, Crítica en Línea tarjeta y que no puede ser sufragada por la comunidad la cual tenía la responsabilidad de comprar el diesel para poner a funcionar los generadores.
Consultado al respecto el director del Fondo de Inversión Local (FIS) José Porta, dijo no tener conocimiento del hecho y que correspondía a la comunidad enviar una nota informando del hecho.