La dura situación por falta de dinero en las comunidades rurales y apartadas del norte de la provincia de Coclé no es sólo lo que ellos padecen, se unen el desempleo, hambre, desnutrición, enfermedades estomacales, pero, sobre todo, una enfermedad que duele más por lo que deja que como llega, se trata de la leishmaniasis o bayano, como ellos la conocen, la que deja "huellas imborrables".
Antonia Rodríguez es una campesina de la comunidad apartada de San Miguel del Norte de Penonomé. Ella es rara la vez que viaja a Penonomé, por la dura situación económica. Según nos contaba, para ellos en estas áreas no hay esperanza de vida mejor y se han acostumbrado a la vida dura y al trabajo fuerte, pero hay algo que a ella le atormenta, y es saber que su hija de tan sólo tres años ya tiene una huella imborrable.
LEISHMANIASIS
Se trata de la leishmaniasis o el bayano; su hija fue picada por un insecto al que ella llama mosquito. Este insecto le afectó el rostro, pues picó a la pequeña justamente en la nariz y por lo alejado de la comunidad y la escasez de dinero no la llEva, Crítica en Línearon a inyectar a tiempo y quedó marcada para toda su vida.
Esta pequeña a la que llamaremos Anita, tiene tres añitos y es posible que ella no sepa que esa huella que le provocó el bayano sea imborrable. Por el momento está tranquila, pero su madre lamenta que su hija quedara marcada para toda la vida con sólo una picada de un insecto, que se infectara y que a los tres días ya se había comido parte de la piel de la pequeña. Esta enfermedad sólo la cura una inyección.
Al igual que Anita, hay muchos casos en Coclé, sobre todo, en el norte, en las áreas montañosas.