Al menos 29 supuestos insurgentes murieron en combates con las fuerzas de seguridad en las conflictivas áreas tribales del noroeste de Pakistán, según fuentes oficiales.
El combate más grave tuvo lugar en la demarcación de Bajaur, donde varios comandos del Ejército apoyados por fuego de artillería y morteros mataron a 18 supuestos insurgentes, dijo el oficial local Iqbal Khattak.
Según Khattak, las tropas rodearon varios escondrijos de insurgentes en el pueblo de Ghundo, situado cerca de la principal ciudad de Bajaur, Khar, y allí atacaron a los insurgentes.