Como un mal precedente para la defensa de la industria local ha sido la presión de intereses foráneos en la determinación de una salvaguardia para la producción del plástico, dijeron empresarios panameños.
Para Juan Sosa, vocero de Celloprint y que mantiene un litigio con el grupo Pascual por la importación de plásticos desde Sudamérica, la injerencia de Perú en la controversia es nefasta para la economía nacional.
"Rechazamos de plano el hecho de que el gobierno peruano amenace a Panamá para tratar de amedrentar a la autoridad. Esto va a todas luces en contra de un proceso transparente que le ha dado igual derecho a ambas partes para sostener su caso", advirtió Sosa a este medio.