Este 1 de mayo, la Iglesia celebra a San José, día de los trabajadores. Padre terrenal de Jesús, quien lo adoptó y lo crío como suyo.
Llamado el "Santo del silencio" por no conocerse palabras expresadas por él, tan sólo se sabe de sus obras, sus actos de fe, amor y de protección como padre responsable del bienestar de su amadísima esposa y de su excepcional Hijo. José fue "santo" desde antes de los desposorios.
Desde el principio recibió la gracia de discernir los mandatos del Señor. Las principales fuentes de información sobre la vida de San José son los primeros capítulos del evangelio de Mateo y de Lucas.
Son al mismo tiempo las únicas fuentes seguras por ser parte de la Revelación.
San Mateo (1:16) llama a San José el hijo de Jacob; según San Lucas (3:23), su padre era Heli. Probablemente nació en Belén, la ciudad de David del que era descendiente. Pero al comienzo de la historia de los Evangelios (poco antes de la Anunciación), San José vivía en Nazaret.