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"Quítale el freno al cambio", pide un repetido eslogan publicitario del conservador Partido Acción Nacional (PAN), al que pertenece el presidente mexicano, Vicente Fox.
La frase incita a los electores a dar mayor apoyo a la gestión del presidente pero, a juzgar por el panorama hacia las elecciones de diputados del 6 de julio y pese a un reciente aumento en la popularidad de Fox, el freno podría seguir puesto.
Según analistas, Fox no lograría la mayoría que necesita en los próximos comicios a diputados del 6 de julio, a pesar de que una reciente encuesta mostró una ventaja sobre su principal opositor, el antes hegemónico Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Los comicios legislativos son cruciales para Fox, que precisa avanzar con reformas trabadas en el Congreso por la falta de apoyo y despejar así el desencanto de una población que clamaba por un cambio cuando lo llevó al poder en el 2000 tras 71 años de gobiernos del PRI, acusados a menudo de autoritarismo y corrupción.
DESENCANTO
Gran parte de la población se mostraba desilusionada con el gobierno de Fox, un ex ejecutivo de Coca-Cola que llegó al poder con la consigna de ser "el gobierno del cambio".
En las elecciones de julio se renovará por completo la influyente Cámara de Diputados, de 500 miembros. |
