Los primeros años de la televisión marcaron un liderazgo en las noticias cuando en 1960 el 4 se hizo con el inmenso Fat Fernández, su director, Jorge Carrasco, Tomy Cupas y Carlos Reyán, distinguidos locutores como su cuerpo de noticias, profesionales que habían construido su profesión con verdadera maestría; voces bien timbradas, fonación bien equilibradas, correcta lectura, y personalidad ausente de muletillas ni vicios engolados.
A estos estupendos maestros, se sumaron sin "pronters" películas en negativo de 16 milímetros, fotos recortadas de revistas y periódicos, diapositivas para hacer más vistoso el noticiero, bisoños locutores como: Sixto Luna, una de las mejores voces que tuvo la radio, Julio Ortega, Celiano Fonseca, Lorenzo Sánchez Galán, una constelación que hizo escuela en el medio.
En el 62, Lindi Paredes contrató para la Televisora Nacional a uno de los hombres que se hizo partícipe en los sentidos de los panameños: Don Mario Velásquez dueño de escrupulosos análisis, no solo políticos sino noticiosos con fuerza y sentido común en entrevistas a personalidades. Don Mario logró ser parte sobresaliente en la diplomacia como embajador en Inglaterra.
Desde ese momento fueron Fernández y Mario guía y Norte de comunicadores.
SERTV, no escapa de esta amalgama, Irene Hernández, periodista de finos quilates se ha rodeado de un equipo humano, que aunque huérfano de "notas rojas" se destaca por información verás, hurgando con escalpelo lo más interesante de lo actual y esta vez con un locutor de imagen fuerte, con voz franca y sincera: Carlos Iván Rodríguez, quien proyecta un tono que se había escapado desde hace algún tiempo de las pantallas de "Lo que somos" para efectivamente lucir como un noticiero de primera, bueno, ese aporte para el Lic. Carlos Aguilar, Director del canal del Estado.
Nuevamente deseamos pronta mejoría para Félix Piñango, Manolo Mardanás, Omaira De León y Edgar Soberón Torchia.
Compañeros que en su convalecencia recuerdan a los amigos del medio con gran cariño.