Con el ojo izquierdo "colombiano" y quejándose de agudo dolor en la cabeza y otras partes del cuerpo regresó al Cuarto de Urgencias del Hospital Santo Tomás, Brunilda Zúñiga.
Brunilda caminaba al ritmo de quien está bailando, pero no era porque escuchaba música sino por las heridas que le ocasionó su marido.
Zúñiga es la madre de los tres niños que el pasado fin de semana junto a ella fueron macheteados por el padre de sus hijos.
El retorno al hospital se produjo producto de las molestias que aún presenta en su anatomía, la víctima.
De su propia boca se podía escuchar el temor con que pronunciaba las palabras de sólo pensar que el hombre que por poco la mata pueda quedar en libertad.
"No es la primera vez que soy agredida por él", dijo refiriéndose a Manuel Teóflilo Benítez, de 38 años.
La hermana de la afectada manifestó que hará todo lo que esté a su alcance para que las autoridades hagan lo correcto: meterlo a la cárcel por lesiones personales.