En medio de abucheos de sus detractores y aplausos de sus simpatizantes, Liborio García tomó ayer posesión de su cargo como defensor del Pueblo ante el pleno de la Asamblea Nacional de Diputados.
Los movimientos feministas se tomaron en gran parte las gradas del Palacio Justo Arosemena y gritaban: "¡No lo queremos!". Entre las manifestantes se destacaban Victoria Figge, Mercedes Eleta, Teresita de Arias, Nelva Reyes, Mery Alfaro, Priscila Delgado y Nivia Rossana Castrellón.
La señora Beatriz Correa de García, madre del nuevo defensor, sufrió una crisis con su presión, cuando salió en defensa de su hijo, lo que motivó su traslado hacia un centro hospitalario, donde fue estabilizada.
Por lo accidentada de la sesión, Liborio no pudo pronunciar el discurso. Salió de la Asamblea rumbo a la Defensoría donde le esperaban algunas sorpresas: varios altos cargos tenían lista su carta de renuncia, entre ellos, Max López, César Solano y Fabián Gutiérrez.
Además reveló que tiene seis candidatos por Defensor Adjunta: tres hombre y tres mujeres.
García explicó antes que no renunciaba, porque sería aceptar que todo lo que se ha dicho, de que es un "maltratador de mujeres", es verdad y además advirtió que estaba en juego la institucionalidad.
Mientras, la Red Nacional de la Mujer y la Familia presentará una denuncia ante organismos internacionales, sobre la supuesta ilegalidad de la resolución de designación del nuevo Defensor del Pueblo.
Teresita Yaniz de Arias, jefa de la Secretaría Nacional de Coordinación y Seguimiento del Plan Alimentario Nacional, del Ministerio de la Presidencia, expresó que "esto ha sido una vergüenza" y que fueron "golpeadas" en su afán por entrar al Parlamento.
La excandidata a la vicepresidencia en la nómina de Cambio Democrático (CD), Roxana Méndez, indicó que García Correa "no es la persona más idónea" para desempeñarse en el cargo. El presidente de Solidaridad, José Raúl Mulino, también pidió la renuncia del defensor.