El presidente Martín Torrijos resaltó que la muerte del Papa Juan Pablo II llena de profundo dolor al pueblo panameño. Fue un hombre defensor de los más desposeídos y desarrolló una incansable labor pastoral alrededor del mundo.
La fortaleza de sus convicciones y la manera como defendió la dignidad humana constituyen ejemplo y estímulo para todos, destacó el jefe del Ejecutivo, añadiendo que Panamá guardará para siempre el recuerdo de un pontífice infatigable y bondadoso que hoy ha entrado al reino de Dios.
Hay que destacar que en las diferentes iglesias nacionales se oficiarán misas en honor a Juan Pablo II.