Decenas de miles de personas, unas 100.000 según fuentes municipales, se han congregado en la Plaza de San Pedro del Vaticano y sus aledaños para expresar su dolor y pesar por la muerte del papa Juan Pablo II.
Los fieles y los curiosos no han dejan de llegar desde que se conoció el fallecimiento del Pontífice a las 21:37 hora local (19:37 GMT) a la gran explanada vaticana, que se encuentra abarrotada.
En el momento del anuncio de la muerte, miles de personas participaban en el rezo del rosario, que se reinició poco antes de la medianoche, después de hubieran sido interrumpido para celebrar un responso.
La noticia del deceso del Papa fue comunicada a los fieles en la Plaza de San Pedro por el arzobispo argentino Leonardo Sandri, y posteriormente el secretario de Estado vaticano, cardenal Angelo Sodano, invitó a la multitud a rezar por Karol Wojtyla.
Así de forma simultánea comenzó a doblar la gran campana de la basílica de San Pedro.