El próximo Papa enfrentará serios retos, como los avances científicos que contradicen las enseñanzas católicas, la declinación de la observancia religiosa en Europa y EU, un marcado aumento de la feligresía en los países del Tercer Mundo, y la baja en el número de sacerdotes en los países de Occidente.
DIFERENCIAS RELIGIOSAS, UN TEMA POLEMICO
El sucesor del Papa ascenderá al trono de San Pedro en un momento de graves tensiones entre las religiones y en un período de disturbios globales, al tiempo que los dirigentes mundiales enfrentan el terrorismo de maneras que la iglesia no siempre respalda. Sin embargo, cuando los cardenales decidan cuál de ellos puede enfrentar esos retos, algunas de sus preocupaciones pueden parecer triviales.
NUEVO PAPA DEBE TENER MAS QUE DECIR
Unos príncipes de la iglesia creen que los cardenales y obispos deben tener más que decir en cuanto al gobierno de la iglesia, en tanto que otros piensan que tales facultades deben estar reservadas al Pontífice. Se buscará un individuo que pueda hablar bien el inglés y el italiano, a fin de comunicarse con los católicos del mundo.
CANDIDATOS EUROPEOS ENFRENTARAN PROBLEMAS
Observadores en el Vaticano dicen que la Iglesia Católica podría optar por alguien que pueda enfrentar los problemas en Europa, donde la fe romana ha sufrido reveses. El elegido sería un italiano o algún otro europeo.