Los trastornos mentales severos, en ocasiones provocan tragedias familiares inesperadas. Este fue el caso de Felipe Lisandro Forves de 20 años, quien luego de sufrir una crisis psiquiátrica decidió acabar con la vida de su hermana de apenas 9 años, a quien le disparó a "quema ropa" en la espalda con una escopeta calibre 20, provocándole la muerte de forma instantánea.
El lamentable incidente ocurrió en la apartada comunidad de Guázaro, en el corregimiento de Calovébora, distrito de Santa Fe de Veraguas, en momentos en que ambos hermanos se encontraban solos en el interior de la humilde vivienda de sus padres, y el victimario cuando simulaba jugar con el arma le disparó a la infante causándole la herida mortal.
Según el informe del Instituto de Medicina Legal, la bala penetró a corta distancia en el cuerpo de la menor quien observaba inocentemente el juego de su hermano con el arma, lo que provocó severas lesiones en el corazón, el pulmón derecho y el hígado, por lo que esta herida mortal dejó a la infortunada infante sin ningún tipo de oportunidad de quedar con vida.
Pero al parecer esta fue una tragedia que se pudo evitar, ya que el doctor Álvaro Duarte, médico forense del Ministerio Público en Veraguas, confirmó que este joven de 20 años estaba recibiendo un tratamiento médico por trastornos psiquiátricos en la provincia de Colón, sin embargo, los propios padres del supuesto homicida reconocieron que su hijo no había acudido a su última cita clínica.
De acuerdo a Duarte, inclusive luego de ocurrido este fatal incidente, los padres del joven agresor, informaron incluso que su hijo no estaba tomando los medicamentos para el control de su problema psiquiátrico ya que los mismos se le habían agotado. Al momento del hecho el sindicado tenía una crisis.
Luego de ocurrida la muerte de la infante, los padres procedieron a enterrar el cadáver de la menor, no obstante, una vez se dio aviso a las autoridades policiales fue exhumada.