El Tribunal Supremo israelí autorizó la reanudación de las obras de construcción de la barrera de separación que Israel levanta en tierras de Cisjordania, en varios puntos en conflicto y en los que los residentes habían recurrido al poder judicial.
Uno de los sitios por donde pasa la cerca de separación -de un total de 750 kilómetros de trazado-, es en torno a las ciudades israelíes de Modiín Ilit, y Hashmonaim, al noroeste de Jerusalén.
También se reanudarán las obras en otra zona junto a la carretera 443 que cruza territorios de Cisjordania y llega a Tel Aviv, y también al norte de Har Adar un poblado israelí, al suroeste de Jerusalén y que limita con una aldea palestina.
En el caso del recurso presentado por los residentes de la ciudad israelí de Mevaseret y los habitantes de la aldea palestina de Bet Surik, donde hace semanas se registraron violentos disturbios, el Tribunal Supremo ha decidido una solución intermedia.