 |
Los soldados de la alianza quedaron nerviosos con el atentado y ahora revisan a todos los vehículos.  |
Las nerviosas tropas estadounidenses, preocupadas por los ataques tipo guerrilla emprendidos por iraquíes vestidos de civil, advirtieron a los conductores que se les acercaban que serían muertos a tiros si no abandonaban el área.
Las fuerzas estadounidenses han clausurado todos los caminos en la región al norte de Nayaf, localidad a 160 kilómetros al sur de Bagdad, y cualquier conductor que se aproxima a un retén militar será atacado a tiros si no da la vuelta luego de recibir esa orden, dijo el teniente coronel Scott Rutter, comandante del II Batallón del VII Regimiento de Infantería de la III División de Infantería.
Es una dimensión completamente nueva. Es muy difícil distinguir a civiles de posibles combatientes'', dijo Rutter. El propósito de la nueva medida estricta es prevenir ataques como el ocurrido el sábado, cuando un taxi estalló en un retén al norte de Nayaf.
El conductor recibió la orden de salir de su vehículo y abrir la cajuela y maletero. Al abrir éste, estalló el vehículo, matando al sujeto y a cuatro soldados de la I Brigada de la III División de Infantería. Ese fue el primer atentado suicida del que se tenga noticias desde el inicio de la invasión.
Mientras tanto, el incremento de seguridad está siendo impuesto para proteger a los soldados de ataques. Un letrero en árabe advierte a los conductores lo siguiente: "Abandone el área o dispararemos''. Los soldados gritarán una última advertencia al vehículo que no haga caso del letrero y entonces abrirán fuego. |