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Pérez Roque.  |
El canciller cubano, Felipe Pérez Roque, instó ayer a Panamá a juzgar a cuatro presuntos terroristas detenidos en ese país cuando, según el Gobierno de La Habana, preparaban un atentado contra Fidel Castro durante la X Cumbre Iberoamericana.
"Cuba espera que esos terroristas sean condenados y el Gobierno de Panamá asumirá una gran responsabilidad internacional si permite que esas personas no se enfrenten a la justicia", afirmó Pérez Roque, que ha participado en los trabajos de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, reunida en Ginebra.
El Gobierno cubano, agregó, "ha denunciado múltiples maniobras para liberar a estas personas de la cárcel y permitirles evadir a la justicia, como ocurrió al terrorista Orlando Puig, corresponsable de la voladura de un avión cubano en 1976 en el que murieron todos sus ocupantes, quien recibió un perdón del presidente George Bush padre y vive libremente en Miami".
Los cuatro presuntos terroristas fueron detenidos cuando, según Pérez Roque, se disponían "a poner una carga de 40 kilos de explosivos en el Paraninfo de la Universidad de Panamá, hecho en el que habrían muerto cientos de estudiantes panameños".
El relator especial para mercenarios, Enrique Bernales Ballesteros, del Perú, tiene la intención de visitar Panamá y El Salvador para investigar las supuestas actividades terroristas relacionadas con ese atentado frustrado, según fuentes de la Comisión de Derechos Humanos.
Luis Posada Carriles es, según Pérez Roque, el "autor intelectual" de la voladura del mismo avión civil en 1976, en la que perecieron sus 73 ocupantes, incluido el equipo juvenil de esgrima.
Posada fue arrestado, procesado en Venzuela, y logró escapar de prisión gracias a la Fundación Nacional Cubano-americana y al entonces embajador norteamericano en Caracas, Otto Reich. |