El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, y el primer ministro italiano, Romano Prodi, se comprometieron a cooperar en el desarrollo de biocombustibles y a fomentar su producción en los países más pobres del mundo.
El compromiso quedó sentado en un acuerdo suscrito entre la empresa brasileña Petrobras y la italiana Eni, que establece marcos de cooperación para la búsqueda de nuevas tecnologías en el área energética.
El acuerdo dice que Brasil e Italia fomentarán alianzas con países "que reúnan las condiciones adecuadas para la producción" de biocombustibles.