Tras una semana de enfrentamientos entre las organizaciones aglutinadas en el Frente por la Defensa de los Derechos Económicos y Sociales (FRENADESO) y las fuerzas del orden público bajo la administración de Ricardo Martinelli, que dejaron más de 240 detenciones y numerosos daños a la propiedad, aparentemente los próximos choques no son solo serán en las calles, sino por las calles.
Todos los obreros y estudiantes detenidos han vuelto a sus casas, lo que evitó un llamado a huelga. Pero ninguna de las dos partes muestran interés en bajar el tono. El Presidente Ricardo Martinelli ha dicho de forma enérgica que quien cierre las calles irá a la cárcel. El Premier José Raúl Mulino, también continuó su discurso pendenciero, asegurando que no tiene problemas en meter en La Joya a más gente que propicie el desorden público y cierre la circulación vial.
Saúl Méndez, dirigente del FRENADESO, le ripostó que si quiere manifestaciones en las aceras, que las haga él.
Esto augura nuevos enfrentamientos, dado que FRENADESO proyecta cerrar un paño de las vías públicas durante futuras manifestaciones y volanteos, lo cual es rechazado tajantemente por el gobierno.
Es hora de moderar el tono para ambas partes. Además, para realizar volanteos no se necesitan cientos de personas en una sola esquina bloqueando un paño. Basta con algunas unidades en los semáforos y aceras para dar a conocer la lucha obrera. Se logra mucho más apoyo en la lucha por los derechos cuando no se violan los de terceros.