Agentes de Inteligencia sirios se retiraron de Beirut y grandes partes de Líbano ayer, un paso importante para cumplir las exigencias de Estados Unidos y de la oposición libanesa.
Mientras que las fuerzas sirias se retiraban, la crisis política de Líbano persistía, ya que el primer ministro favorablea Siria, Omar Karami, no lograba convencer aún a sus opositores para que se sumen a un gobierno de unidad.