Euclides Reina Torres aparentemente no pudo soportar el tormento de ser acusado del supuesto delito de decapitar y dar 16 machetazos a su sobrina Aidith y ayer, lunes, en la cárcel de esta ciudad, se suicidó lanzándose contra el pavimento, desde lo más alto de su celda.
Euclides, de 26 años, no dejó nota del porqué tomó esa decisión, aunque se presume que la acusación en su contra tuvo que ver.
Torres tenía un mes y 15 días en la cárcel de Santiago, sindicado por el supuesto delito de homicidio en perjuicio de su propia sobrina de tres años, Aidith Torres, muerta decapitada y de 16 machetazos, hecho ocurrido en el distrito de Río de Jesús, el pasado 25 de enero.
Los primeros informes de las autoridades policiales de la zona de Policía de Veraguas detallan que el detenido recibió el desayuno a eso de las 07: 00 de la mañana, y posteriormente a las 08: 00 fue encontrado tendido sobre el piso sobre un charco de sangre.
Según el Fiscal Superior, Tomás Muñoz, el detenido ahora occiso se estranguló. Para ello supuestamente se subió al techo de la celda donde estaba recluido y se lanzó de cabeza al piso, impactando contra el pavimento.
El asesinato de la niña, que paralizó a la comunidad veragüense, se dio en un incidente confuso hace un mes y quince días, el cual las autoridades investigan. No fue hasta ayer, lunes, que se informó que el detenido ahora muerto padecía de posibles trastornos mentales que lo llevaron a suicidarse.
A la cárcel de Santiago se presentaron unidades de Criminalística de la Policía Técnica Judicial y funcionarios de la Fiscalía Superior para iniciar las investigaciones en el caso donde Euclides - señalado de homicidio en perjuicio de su sobrina- decidió quitarse la vida.
INVESTIGACIONES
Euclides Reina era sindicado por el homicidio de su sobrina, a quien decapitó el pasado 25 de enero. El hombre primero desayunó y luego supuestamente cometió el suicidio. Atentar contra la vida propia es un delito censurable por la sociedad.