El presidente de EE.UU., George W. Bush, acusó a Irán de apoyar a los insurgentes en Irak y aseguró que cada vez más se encuentran componentes iraníes en las bombas empleadas por los rebeldes iraquíes.
En un discurso pronunciado en la Universidad George Washington, Bush defendió la guerra en Irak, en momentos en que la popularidad del conflicto atraviesa por sus momentos más bajos y a una semana antes de que la invasión del 20 de marzo de 2003 cumpla su tercer aniversario.