Mientras David Murcia Guzmán no declare y se ratifique ante los fiscales panameños de sus declaraciones a los medios de comunicación, donde asegura haber donado $6 millones a la campaña del PRD, sus señalamientos no tienen validez, señaló el secretario General de la Procuraduría de la Nación, Rigoberto González.
El dueño de la captadora financiera DMG detenido en Bogotá, debe cumplir con lo establecido en el Código Judicial, donde se señala que las confesiones son válidas ante un fiscal que lleva la causa.
"Hay personas que dicen algo ante los medios de comunicación y cuando están ante el fiscal dicen que no tienen prueba de eso. En la medida en que se incorporen en la investigación y rinda declaración, entonces tienen validez", explicó González.
"Qué ocurría si van a indagar a Murcia y él dice, yo no dije eso", cuestionó el secretario del Ministerio Público.
González ante la insistencia de los medios de conocer si se iniciaría una investigación por las donaciones de dineros de Murcia, quien está acusado de lavado de dinero producto del narcotráfico, sostuvo que deben analizar la investigación que realiza la Fiscalía Primera de Drogas primeramente, para poder tomar una determinación.
Según el funcionario de la Procuraduría, los abogados de Murcia no accedieron a que su cliente fuera indagado en La Picota por un Fiscal panameño.
Balbina Herrera y Roberto Velásquez negaron haber recibido dinero de Murcia, pero el candidato a la Alcaldía de Panamá, aceptó ayer que conoció y se reunió con el colombiano, pero reiteró que no recibió una millonario donación como alega el detenido dueño de DMG.
GOBIERNO REACCIONA
El ministro de la Presidencia, Rafael Mezquita negó que hubiese cuadrado la seguridad de David Murcia durante su estancia en Panamá, utilizando para ello a agentes del SPI.
Mezquita destacó que en los registros del SPI, no aparece ningún servicio de seguridad brindado a Murcia, pero reveló que cuando se produjo su arresto acompañaba al colombiano el exagente del SPI, Alfonso Mosley Martínez, quien había sido dado de baja el 13 de marzo de 1995.
Mientras, el mandatario Martín Torrijos tildó de absurdas, ridículas y totalmente vinculadas a la época electoral que está viviendo el país, las declaraciones hechas por David Murcia Guzmán.
Torrijos opinó que no le parece objetivo que los panameños utilicen como referencia las afirmaciones de un detenido, cuyas declaraciones tienen la intención de afectar a la clase política y perturbar las elecciones del 3 de mayo.
"No les parece extraño que el gobierno que captura en tiempo récord a este señor, lo entrega a la justicia y recibe las felicitaciones de las autoridades de Colombia, ahora sea objeto de sus acusaciones en plena época electoral", preguntó el Mandatario.