La oscuridad de la noche no le permitía visualizar a unas unidades que patrullan el área de Bethania, qué era lo que se movía en el piso.
Uno de los uniformados se bajó del patrulla ya que escuchaba una voz débil que con esfuerzo pedía auxilio.
Ahí estaba, tirado en el suelo, casi temblando del dolor.
Ricardo Palacios Muñoz, de 32 años, un ciudadano que se ganaba sus reales a punta de vender bollo, había sido arrollado por un vehículo que aparentemente se había dado a la fuga.
Minutos después las autoridades dieron aviso a la Policlínica de Bethania, de donde enviaron a unos paramédicos en la ambulancia 139 para socorrer al hombre.
Luego de brindar los primeros auxilios, Palacios fue trasladado a la Sala de Urgencias del Hospital Santo Tomás.
Horas después de haber recibido atención médica, el ciudadano fue dado de alta, y entonces relató lo que le había sucedido.
