El anuncio de la empresa Dubai Ports World (DPW) de que renunciará a la gestión de seis puertos de EE.UU. ha dado un respiro a la Casa Blanca, que se encaminaba a un duro enfrentamiento con el Congreso.
La compañía de los Emiratos Arabes Unidos anunció que transferirá sus activos en EE.UU. a una empresa local.
El anuncio se dio después de que un comité del Senado aprobara una enmienda, por 62 votos contra 2, que prohibía que DPW se hiciera cargo de la gestión de esos puertos: Baltimore, Nueva Jersey, Nueva York, Nueva Orleans, Filadelfia y Miami, antes bajo control de la empresa británica PyO.