La belleza de nuestros paisajes es impresionante, pero uno de los lugares del Pacífico que es realmente una joya ecológica es el Parque Nacional Coiba (PNC).
La protección de este parque, que está conformado por 38 islas, y que ha sido declarado por la UNESCO como sitio de Patrimonio Mundial Natural, es muy valiosa porque, al igual que en otras islas de Costa Rica, Colombia y Ecuador forman el Corredor Marino, allí ocurren interacciones ecológicas muy importantes para la fauna y flora marina.
Gabriela Etchelecu, directora de la Fundación MarViva y organizadora de la gira didáctica a Coiba, explicó que están trabajando fuerte en materia de protección de las diferentes áreas ecológicas del país, ya que esto beneficia a las presentes y futuras generaciones.
"El trabajo es intenso, pero cada vez que los pescadores nos dicen que ahora encuentran más peces que antes por el trabajo de conservación que se está haciendo, siento que el esfuerzo no es en vano", afirmó Etchelecu.
Entre las actividades que realiza MarViva para proteger el Patrimonio Mundial Natural están: los patrullajes de control y vigilancia en las Áreas Marinas Protegidas para evitar que se realice la pesca ilegal para que se recupere la biodiversidad de las AMP.
Además, MarViva promueve la generación de normas ambientales o reformas a las leyes existentes.