Admiración a propios y extraños causa la cantidad de flores que tiene este árbol de Guayacán en la entrada del distrito cabecera de Montijo, dándole una vista hermosa a este pueblo que dejó crecer esta especie en medio de la comunidad.
La belleza de las flores que tiene este árbol, es una verdadera muestra de lo buena que es la naturaleza con el hombre, ya que pese a la destrucción o daño que se le causa al ecosistema, aún así lo premia.
Este premio de dar tantas flores es para aquellas manos que cuidaron a este Guayacán el que, a pesar de estar solo en medio del pueblo, florece para dar momentos de embellecimiento pese a que la mayoría de ellos han sido talados.
Esta especie de árboles que en otrora fueron comunes en nuestros bosques tropicales húmedos de la región Veragüense, están a punto de desaparecer; ellos fueron abundantes y ahora hay áreas dónde ya no existen, por lo que, algunas personas buscan semillas para hacer viveros y reforestar sus tierras con especies nativas como estas.
Aquellas personas que tuvieron la oportunidad de visitar Puerto Mutis o Montijo durante estos días, se percataron de la belleza que nos ofrece la madre naturaleza, si la cuidamos.
Queda claro que hay que preservar la naturaleza y esta ha sido la lucha constante de los conservacionistas, ambientalistas y las autoridades como la ANAM en Veraguas; sin embargo, existen manos que quieren acabar con estos regalos que brinda la madre naturaleza.
Aún el hombre no ha podido reproducir la belleza, el encanto, los colores y la fragancia que provienen de estas flores del Guayacán.