Durante una audiencia oral celebrada el viernes 29 de febrero, un jurado de conciencia declaró "¡culpables!" a Eladio Junier Blandón Hernández, alias "Chino", y a Edwin Alexis Valencia Advíncula, por el homicidio de Nicanor Ureña Campos.
Ureña falleció de un disparo por la espalda que lo alcanzó en la cabeza, la madrugada del 2 de enero del 2005, en La Felicidad, en Mano de Piedra, San Miguelito.
El Segundo Tribunal Superior de Justicia en septiembre del 2006, llamó a Blandón y a Advíncula para que respondan por el homicidio, logrando detenerse a a Advíncula, mientras que a la hora de ser proferido el llamado a juicio, "Chino" aún permanecía prófugo.
Durante las investigaciones que duraron varios meses, el tribunal logró determinar que Blandón y Advíncula, luego de sostener una riña con Ureña y sus hermanos, se fueron y luego regresaron a la casa del hoy occiso, y le dispararon por la espalda cuando éste intentaba escapar, hieriéndolo en la cabeza, lo cual le causó la muerte.
El cuerpo de Ureña presentaba excoriaciones en la frente, pómulo derecho, parte superior del labio y en el antebrazo derecho. Advíncula alegó haber conocido a Ureña horas antes de ocurrir el hecho de sangre, durante una fiesta.