Si hay algo que es bien cierto es que nuestra selección Sub-23 tiene el potencial, el coraje y la garra para vencer a cualquier otro equipo que se le ponga por el frente; siempre y cuando se tenga un buen entrenamiento físico y mental y sobre todo, se realicen partidos de fogueo para conocer nuestro potencial.
Nuestra selección parte mañana 8 de marzo hacia los Estados Unidos con un saco lleno de esperanzas a su espalda, con el fin de obtener los puntos necesarios que les dé el boleto directo a las Olimpiadas Beijing 2008.
El camino es difícil, pero considero que tenemos todos los elementos necesarios para empezar a fabricar fantasía y llegar a lo más alto de esta contienda, la clave de todo está en hacer goles, tener una defensa de hierro y dominar la mayoría de tiempo el balón.
Sé que nuestros rivales Cuba, Honduras y Estados Unidos lucharán por el mismo objetivo y que nos llevan la delantera en partidos de preparación, pero al final ningún partido se parece a otro.
A mi querida Sele, les digo que me siento satisfecha por el trabajo desempeñado hasta el momento a los cuales no podemos pedirles más; sé que lo que viene es duro, pero si jugamos con el corazón y poniendo en práctica todo lo aprendido y sobre todo, con Dios por delante podemos llegar a donde queremos.
A la marea roja, llegó el momento de demostrar que somos el jugador número 12, haciendo que los latidos de nuestros corazones se escuchen hasta Tampa, Florida, cuando nuestra tricolor enfrente al combinado de Honduras el 11 de marzo, aunque es el primer juego de tres que realizaremos. Estos tres puntos son la llave que nos darán la ventaja de todo; muchachos la esperanza es lo último que se pierde, así que a demostrar que al igual que ellos por sus venas corre sangre futbolística y tenemos la técnica para enfrentarlos.
Buena suerte Panamá y Dios está con ustedes, se les quiere de gratis.
PARTIDOS: 04 AMISTOSOS
La Sub-23 jugó cuatro choques internacionales en Argentina.