Luego del asesinato y decapitación de Hugo Spadafora en 1985, sus familiares y grupos civilistas emprendieron una lucha incansable por llevar a los responsables ante la justicia. En esta imagen, tomada el 13 de septiembre de 1993 en la provincia de Chiriquí, muestra a un grupo de manifestantes reclamando justicia con pitos, pañuelos, pailas y cartelones.