Saludos amigos y amigas del béisbol, bienvenidos a otra jornada de la pelota criolla, hoy, pensativos, tras una jornada de descanso del "tri" campeón Herrera y una seguidilla de derrotas que ponen a pensar sobre el favoritismo y vulnerabilidad de los de Azuero.
Hablaba ayer con Yoyi Tello sobre el tema y sobre el momento difícil del equipo y me dijo algo que me puso a meditar: "Pineda, si cuando andamos así, es cuando somos peligrosos".
Y tiene razón, Herrera ha tenido sus problemas en la carretera, pero al final se repone y saca la casta de campeón que lleva por dentro.
Herrera ha perdido cuatro juegos corridos, con un pitcheo que ha sucumbido en las aguas turbulentas, no ha sonado a gusto la pelota y su defensa ha sido más que tambaleante.
En esta seguidilla de derrotas ha pasado de todo, para los "Tri" campeones. Roberto Gutiérrez recibió un pelotazo en la cabeza, Luis Iglesias argumenta un tirón en la espalda y por eso no se puede agachar (tiene 9 errores).
El bus que los llevó a Colón fue objeto de un robo con cuchillo en mano, donde perdieron un radio o equipo de sonido que había comprado el manager Israel Delgado y un juego de sábanas que había adquirido el jardinero Héctor Avila.
El campeón viene de perder ante Panamá Oeste en un festival de batazos, cae ante Los Santos, tras nueve años de hegemonía, tropieza con Veraguas en una joya de pitcheo de Rafael García y cae en Colón, en una salida que no se aprovechó el buen trabajo de Willy Lebrón, el as de la colina herrerana.
Pero así es la pelota y no hay quien pueda contra eso. Herrera subió y tocó cielo, en la primera ronda. Los grandes se levantan y andan, los endebles se desploman y van al piso de la mediocridad.
Herrera tiene con qué reponerse y seguir adelante. Es cuestión de salir con garra y a la hueste herrerana le sobra.
Amanecerá y veremos.
UNA CORTITA..
El nuevo estadio de Santiago, el Omar Torrijos, podría ser inaugurado el 11 de octubre de este año y su superficie podría ser de grama artificial. Una copia del terreno de juegos del Hiram Bithorhn de San Juan, pero en la capital veragüense.
¡Viva, el béisbol!