Un niño de 14 años ha sido acusado de la muerte del pequeño Joe Geeling, de 11 años, cuyo cadáver fue descubierto el pasado jueves en Bury (condado de Greater Manchester, en el noroeste de Inglaterra), informó ayer, la Policía.
El sospechoso, cuya identidad no se ha divulgado por tratarse de un menor, comparecerá hoy, lunes, ante un tribunal de Greater Manchester, confirmó una portavoz policial.
El presunto asesino fue detenido el pasado jueves, cuando el cuerpo de Joe fue encontrado en una zanja situada en un parque de la localidad de Bury.
A la víctima se la vio por última vez el día anterior a la salida del Colegio de Enseñanza Secundaria de San Gabriel, en esa localidad del norte de Inglaterra.
Según reveló la autopsia, el pequeño, que padecía fibrosis cística (una enfermedad genética que puede ser mortal), falleció como consecuencia de las heridas causadas por múltiples puñaladas.
La familia de Joe emitió un comunicado en el que describió al niño como un "pequeño ángel" y "una de esas personas especiales que si la conoces y pasas cinco minutos hablando con él, dejará una impresión en ti que recordarás con cariño".
Sin poder contener las lágrimas, el padre del pequeño, Tom Geeling, dijo que su hijo era simpatizante del equipo de fútbol Manchester City, le encantaban las motos y nunca "dejó que su enfermedad le limitase" en su vida.
El director del Colegio de Enseñanza Secundaria de San Gabriel, Eddie Robinson, señaló que la muerte de Joe ha "conmocionado" al centro académico, y expresó su apoyo a la familia "en estos momentos tan difíciles".
"Joe era un niño encantador y educado a quien echarán mucho de menos sus profesores, amigos y compañeros", agregó Robinson.
Varias parroquias de Bury tenían previsto celebrar ayer servicios religiosos como tributo a Joe Geelind.