La tranquilidad es la mejor amiga de �scar McFarlane, ahora que se ha instalado en el fútbol incaico. Todo es color de rosas para el panameño, que se destaca con su equipo, el CNI.
Ayer, vía telefónica, habló de todo lo que le ha ocurrido en este último tiempo. "Acá me tratan bien, gracias a Dios. Llevo cinco partidos, entre amistosos y oficiales, donde sólo me han hecho un gol", comentó McFarlane.
El jugador dice sentirse muy cómodo en Iquitos, donde lo tratan de la mejor manera. "La gente me quiere, pero extraño a mi familia, en especial a mi hija y a mi esposa", dijo.
Además, espera que su pareja dé a luz, para que pueda reunirse con él: "ojalá se dé pronto", confió. Por otro lado, contó que la gente ya le tiene un apodo, producto se sus buenas actuaciones: "me dicen Superman, ja", se ríe.
Respecto a lo acaecido cuando se los encontró tomando licor, McFarlane dijo que ya es algo del pasado. "Eso sucedió un sábado, teníamos el domingo libre y entrenábamos recién el lunes. Acepto que tomé unas cervezas".
Por último, dijo que mantiene la esperanza de vestir la "roja" nuevamente. "Quiero dejar mi país en alto. Estoy rogando que el profe (Stempel), me convoque", finalizó.