La exhibición de fuerza, potencia, furia y ganas que dio el dominicano Rafael García no tiene techo en la pelota criolla.
García debutó con los Indios de Veraguas a lo grande en la pelota nacional con un juegazo de 8.2 entradas y un sólo imparable tolerado ante Panamá Oeste.
"Vamos a la parte alta de la novena entrada, Oeste pierde 2 por 0 y encara al dominicano Rafael García que ha tenido una noche de alarido", dijo el narrador,
mientras una nube de tensiones cubría el estadio José Antonio Remón Cantera de Aguadulce.
El derecho cibaeño amarraba bates en su primera salida en la pelota panameña y dejaba una impresión dominante en la colina, en partido del miércoles por la noche.
"Estamos a un out de hacer historia" retumbaba la voz del narrador sumamente emocionado y con un eco en todo el estadio. "Levanta los brazos, viene para el plato, bola.. la primera". Los aficionados gritaban y algunos empezaban a mirar al cielo, como pidiendo a Dios que le ayudara con el out 27.
"Viene para el plato, lanzamientooooooo, machucón hacía el lanzador, se puede acabar el partido, pero se cae García, la pelota queda en el terreno, hay que darle imparable a Víctor Morales, el primero que da Oeste en el juego y se va la oportunidad de lanzar un juego sin hit y sin carreras", explicaba ya no tan alegre el narrador deportivo.
Aún García no se levantaba de su tropezón en la lomita y la afición le regalaba una salva de aplausos. Los zapatos de suela de hierro se clavaban en la tierra y le jugaron un mal momento, en un instante poco favorable.
Rafael García lanzó 8.2 excelentes entradas, permitiendo 1 inalcanzable, tres boletos, 11 ponchados y una imagen sólida en su debut, llevando a Veraguas a un triunfo de 2-0 sobre Panamá Oeste.
"Le doy gracias a Dios primero, por la labor realizada, le dedicó el partido a toda la afición veragüense y también a mi hija Vanelis, en Dominicana, un beso y un abrazo para ella", dijo el derecho de 90 millas y más en su recta.
El merenguero usó además un lanzamiento en slider a buen ritmo y un cambio de velocidad que dejaba desarmada a la tropa vaquera. "No sentí ninguna presión, resbalé y me caí, no se dio el no hittter, pero Dios en otra oportunidad quizás me lo de", dijo.
Abordado por dos periodistas de emisoras regionales y Panamá América, García se tomaba el tiempo necesario para responder a las preguntas.
"Siempre que voy a la loma me encomiendo a Dios, di todo mi esfuerzo, he dado el mejor trabajo, con tiempo de no lanzar", indicó.
El dominicano de 28 años de edad, nació en la ciudad de Nagua, República Dominicana el 24 de octubre de 1979, firmó para jugar profesional con los Reales de Kansas City, vio acción en la liga japonesa, en Nicaragua y ahora llega a Panamá, para ayudar a los Indios de Veraguas.
En su última liga, Nicaragua, jugó con los Indios del Bóer, donde ganó 6-2, ponchó a 49, su efectividad fue de 2.90 en 68.1 entradas trabajadas.