La Fiscalía Primera de Circuito negó la medida cautelar solicitada a favor de Próspero Ortega y Ariel Ortega, quienes permanecen detenidos, a raíz del incendio del bus 8B-06 el pasado 23 de octubre del 2006.
Próspero Ortega era el conductor del bus el día de la tragedia y su hermano Ariel, el dueño de dicho bus.
Ayer, sus familiares efectuaron un piqueteo en las escalinatas de la Corte Suprema de Justicia, en rechazo a la medida adoptada. Con cartelones en manos exigían justicia para ambos, porque según ellos, existen otras personas que deberían responder por lo sucedido.
Por su parte, el abogado Valentín Jaén sostuvo que los hermanos Ortega no deberían seguir detenidos, porque no existen pruebas que los vinculen a la realización de los trabajos de mecánica y refrigeración del bus incendiado.
"Yo no quiero pensar que los hermanos Ortega sean rehenes de ciertos sectores que quieren cambiar la ley de transporte y que han utilizado un hecho funesto como el ocurrido, para justificar la reforma a la ley del transporte", argumentó el abogado Jaén, quien añadió que estará interponiendo otros recursos ante la Corte Suprema de Justicia para lograr la libertad de los hermanos Ortega.
