El presidente de Ecuador, Rafael Correa, calificó ayer de "desastre" las inundaciones provocadas por las lluvias que han azotado desde enero pasado la zona costera del país, que han causado la muerte de 16 personas y pérdidas por más de 161 millones de dólares en el sector agrícola. "Esto ya no es una emergencia, es un desastre", dijo Correa después de un sobrevolar las zonas afectadas por las inundaciones. Tras lamentar la muerte de 16 personas por las inundaciones, Correa pidió unidad a sus compatriotas y a las autoridades locales para afrontar de mejor manera la emergencia que ha provocado millones dólares en pérdidas en el sector agrícola.
De acuerdo con el Ministerio de Agricultura hasta el momento se han perdido 114.384 hectáreas, gran parte de ellas pastizales para ganado, arroz, cacao, plátano y maíz.