La bala tenía como destino a otra persona, pero fue una mujer inocente la que pagó el precio del odio entre delincuentes. Maritza Alarcón de Babilonia, quien se dirigía a visitar a su madre en la Calle 13 Meléndez en Colón, recibió un t iro en la espalda que le quitó la vida.
"China", como todos la llamaban de cariño, luchó 6 horas por su vida, pero pereció en el Hospital Manuel Amador Guerrero.