El Atlético de Madrid cerró el partido de ida de los dieciseisavos de final de la Liga Europa con un empate, demasiado premio para el Galatasaray, en un duelo controlado por el equipo rojiblanco, el protagonista de la mayoría de las ocasiones y obligado a remontar la próxima semana en el estadio Ali Sami Yen.
Ahí le esperará un ambiente difícil al conjunto madrileño, que concedió un 1-1 inesperado en el tramo final del choque, en una indecisión de Sergio Asenjo en un centro al área y aprovechado por Kader Keita. Ese gol niveló la ventaja del Atlético, que vivió casi una hora con el marcador a su favor tras el 1-0 de Reyes.
De principio, al Atlético le costó encontrar el ritmo del partido. No andaba fino contra un Galatasaray a la expectativa, mucho más conservador de lo que anunciaba el holandés Frank Rijkaard en la previa y con muchos hombres siempre por detrás de la pelota, pero al equipo madrileño le bastó una ocasión para el 1-0.
No había tirado a la portería del argentino Leo Franco, pero el primer disparo, a los 22 minutos, en un lanzamiento de falta de José Antonio Reyes a la escuadra del palo defendido por el guardameta visitante, dio ventaja al Atlético. Un buen gol del extremo andaluz, en su mejor momento como rojiblanco desde su llegada hace tres años.
Ese tanto impulsó al bloque local, hasta entonces sólo inquietado en ocasiones tan aisladas como irrelevantes de Arda Turan y dueño de la mayoría de oportunidades en el viaje hacia el descanso, en el que aprovechó la inesperada debilidad de la zaga turca para poner a prueba los reflejos de su ex compañero Leo Franco.
Un córner directo del portugués Simao, un cabezazo del checo Tomas Ujfalusi, un disparo demasiado cruzado del uruguayo Diego Forlán y, sobre todo, una acción del argentino Kun Agü ero en el área, salvada con habilidad por el arquero rival, hicieron al Atlético acreedor del 2-0 en el primer tiempo, cerrado, eso sí, con un paradón de De Gea a un ajustado remate de Mustafa Sarp.
No era un gran partido del intermitente equipo rojiblanco. Suficiente para dominar el marcador y para tener una tranquilidad prácticamente absoluta en defensa, sobre todo por la incapacidad de su rival, pero aún mejorable para lograr un resultado de garantías para el choque de vuelta de la próxima semana en el Ali Sami Yen.