En una sociedad en la que hay que estar alerta para no ser víctimas de los ladrones, cada quien busca la forma de proteger sus bienes.
El tener que pagar para contratar los servicios de un guardaespalda, costaría hasta el doble de un salario promedio.
En Isla Colón, provincia de Bocas del Toro, una familia goza del privilegio de contar con un amigo que los cuida día y noche.
Estamos hablando de un "perro vigilante". Y es que el canino cuida el auto de su dueño, mientras éste lo estaciona para hacer sus mandados.
El osado perro se sienta en el puesto del conductor y, gracias a su gran tamaño, puede observar quién se le acerca.
Ningún extraño puede aproximarse al vehículo, porque comienza a ladrar y nadie lo para. Si las personas se descuidan, hasta podría morderlas.
En este turístico lugar, las personas no se acercan al carro porque ya lo conocen. Con un perro como éste, no se necesita de ningún policía para cuidar.
Este medio trató de acercarse, pero los ladridos dejaron la misión por la mitad, ya que empezó a sonar la alerta: "guau, guau, guau".