La ciudad de La Romana, en República Dominicana, fue el escenario en el que un grupo de 13 leyendas del béisbol latinoamericano ingresaron al Salón de la Fama Latino.
En ese grupo de figuras estaba el panameño Manuel "Manny" Sanguillén, quien tuvo una gran trayectoria de 13 temporadas con los Piratas de Pittsburgh y los Atléticos de Oakland.
AGRADECIDO.
En palabras emitidas por la página de internet espndeportes.com, Sanguillén calificó como una sorpresa agradable el hecho de ser exaltado al recinto de las grandes figuras del béisbol en América Latina. Más aún en República Dominicana, donde jugó para las Águilas del Cibao.
"Esta idea hecha realidad es algo que todos los peloteros latinos estamos obligados a valorar, ya que tenemos nuestro propio hogar, sin ningún tipo de discriminación, donde solo se evalúa la calidad del juego y el accionar social en nuestros países, y los números que hemos puesto cuando estuvimos activos en el béisbol de Grandes Ligas", destacó Sanguillén.
El ganador de dos series mundiales con los Piratas, en 1971 y 1979, comentó que las barreras del idioma y del color de su piel son los principales obstáculos para que ex peloteros afrodescendientes como él y otros no ingresen al Salón de la Fama del Béisbol en Cooperstown, Nueva York.
OTROS EXALTADOS.
Además de Sanguillén, ingresaron al recinto Dennis Martínez Fernando Valenzuela, Andrés Galarraga, Edgar Martínez, Ricardo Carty y Luis Tiánt.
Además, fueron exaltados por el Comité de Veteranos el panameño Héctor López, Vidal López, Rubén Gómez, Oscar Prieto, Horacio Martínez, José Luis Gómez y Adolfo Luque.