El magistrado presidente del Tribunal Electoral (TE), Erasmo Pinilla, responsabilizó a los subalternos y asesores del contralor Carlos Vallarino de mal informarlo y de ser los responsables del enfrentamiento público entre ambas instituciones del Estado por la contratación de una empresa para el nuevo sistema de cedulación.
A criterio de Pinilla hubo "mucha subjetividad" de parte de los funcionarios de Contraloría, lo que provocó que trascendiera a nivel público una discusión que debió mantenerse a nivel ejecutivo.
Indicó que con un manejo más profesional de la información se hubiese evitado el entredicho en que ha quedado el TE en un año pre electoral.
En una carta enviada al contralor el pasado 8 de febrero, el funcionario rechazó que la contratación de la empresa L-1 se hiciera de forma directa, sin agotar los procedimientos de la ley de contratación pública.
Un aspecto ponderado por el magistrado fue el ahorro de $2.1 millones dentro de la negociación para el contrato de nueva sistema.
Pinilla arremetió en su carta contra el Tribunal Administrativo de Contrataciones Públicas, a quien acusó de pretender que se cometiera un "exabrupto jurídico" al opinar que se adjudicara dicho contrato a una de las empresa que no cumplió con el pliego de cargos.