En los alrededores de la Plaza 5 de Mayo, los conductores y peatones corren peligro.
Los delincuentes se robaron las alcantarillas dejando los huecos que son tapados con las llantas de los automóviles y los cuerpos de algunos transeúntes que caen en los mismos terminando en ocasiones, en el hospital.
El cobre es perseguido por piedreros y ladrones de otro nivel, para conseguir plata, por lo cual se pide más vigilancia en el área.