Lejos del bullicio de la ciudad y cerca del Parque Nacional Altos de Campana, la Autoridad Nacional del Ambiente (ANAM), mantiene dos cabañas, la cuales son reservadas para los turistas nacionales y extranjeros que gustan del ecoturismo y la exploración.
Desde las cabañas se puede contemplar la desembocadura del Río Sajalices en el mar o si lo prefiere, caminar cuatro horas por el bosque hasta llegar al sitio en donde nace este afluente; además de admirar parte de la cordillera y disfrutar del clima.
Gilberto Graell, guarda parque de la ANAM, indica que es durante la temporada de verano cuando las cabañas son ocupadas con mayor frecuencia, para lo cual se deben realizar reservaciones con anticipación.
Los nacionales y extranjeros deben pagar B/.5.00 por persona por cada día; además de un balboa por la entrada al parque, precio que aumenta para los turistas extranjeros, quienes deben pagar B/.3.00.
Según Graell, las cabañas están adecuadas con lo básico y para albergar a cuatro personas aunque carentes de gas para cocina. Ya en las cabañas se puede optar por las caminatas por alguno de los cuatro senderos que existen dentro del Parque.
