"La educación que les des a los niños es el futuro"... fue la frase que resultó de la conversación con mi esposo, al momento de pensar en un título apropiado para este escrito.
Con rapidez vino a mi mente el cómo iniciaría el tema y el por qué del título. Un título tan inocente para hablar del medio ambiente, cuya temática llega a involucrar consideraciones de alto calibre económico por los intereses políticos que mueve.
Pero en esta ocasión, el enfoque está ubicado en la conciencia social que hay que motivar en los niños, cuando les enseñan el respeto que deben tener hacia la madre naturaleza, protectora de la vida sobre el planeta.
En este sentido, fue creado el "Eco Club Ambiental de Tierras Altas" de Chiriquí, integrado por 100 niños, que pertenecen a las dieciocho escuelas primarias de la zona escolar 14 (Volcán, Caizán).
Estos cien primeros estudiantes de primaria, forman parte de un grupo seleccionado para demostrar que los alumnos de este nivel prestan más interés en las cosas que se les enseñan, lo que hace la tarea de educarlos más fácil. Según destacó el ambientalista (profesor) Rafael Guerra González.
Hay que destacar, que estos niños viven dentro de un medio propicio para esta tarea de orientarlos hacia una nueva cultura ambiental. Rodeados de encantadores paisajes, también se enfrentan a un compromiso social amplio, debido a la responsabilidad de combatir las malas costumbres que practican los agricultores. Males que deterioran el ambiente como la pérdida de tierras fértiles por incendios forestales, tala indiscriminada y contaminación en los ríos se tratan de aminorar mediante la reforestación de las zonas lastimadas.
A las faldas del Volcán Barú, el 5 y 6 de diciembre pasado estos cien niños realizaron un proyecto de siembra de árboles. Dentro del programa conjunto al ANAM, MEDUCA y conservacionistas, se contempló el cine debate con la presentación de películas ambientales. Y escucharon a un grupo de títeres hablando sobre la conservación del ambiente.
Para este año, el plan de educación ambiental en Tierras Altas incluirá a 200 estudiantes, entre primaria, secundaria; como a iglesias, empresas y habitantes.